lunes, 2 de enero de 2012

La carta de Jesus


Cuando te levantabas esta maƱana, te miraba con ternura y esperaba que me hablaras aunque fuera unas palabras, pero estabas muy ocupado arreglƔndote para el trabajo y pensando en tus asuntos. Seguƭ esperando mientras corrƭas camino al trabajo.

¿No te fijaste quĆ© esplendoroso fue el amanecer que hice para ti? ¿Es que andabas mal humorado por las demoras del trĆ”fico?. Por eso quise alegrarte con el trinar de miles de pĆ”jaros, esperando que asĆ­ vieras mĆ”s allĆ”, la grandeza de mi amor. Pero era inĆŗtil. Estabas absorto en las noticias de la radio. No te diste cuenta de nada.

EsperĆ© pacientemente todo el dĆ­a. Cuantos momentos quise tocar tu corazĆ³n. Te enviĆ© personas con sonrisas en sus labios. ¿Recuerdas aquel niƱo tan simpĆ”tico y travieso que tropezĆ³ contigo en la calle?. Lo puse en tu camino para hacerte pensar que eres tu tambiĆ©n un niƱo en manos de tu Padre Celestial. Pero, con todos tus planes y preocupaciones, aquello te pareciĆ³ una molestia.

De regreso a casa vi tu cansancio y quise refrescarte un poco con una suave brisa. Mas tarde apaguƩ el resplandor del cielo creando un maravilloso espectƔculo de colores celestes. Aquella puesta de sol era para ti. PensƩ que te recordarƭa cuanto te quiero...

Deseaba tanto que me hablaras... aĆŗn quedaba tiempo. Pero encendiste el televisor... asĆ­ que espere pacientemente mientras pasabas de programa en programa tratando de relajarte y pasar el tiempo.

Al cenar pensƩ que recordarƭas que todo procede de mi amor por ti, pero nuevamente te olvidaste de hablar conmigo.

En la noche no te dejƩ a oscuras, sino que hice salir una hermosa luna y millares de estrellas, pero no levantaste la cabeza.

A la hora de dormir acompaƱƩ tu sueƱo con las suaves melodƭas de mis animales nocturnos, pero no te diste cuenta de que siempre estoy a tu lado.

TE AMO tanto que espero todos los dĆ­as por una oraciĆ³n tuya. ¿CuĆ”ndo serĆ” que te des cuenta? SerĆ” algĆŗn paisaje hermoso, una mano amiga, o quizĆ”s una enfermedad o alguna desgracia que te haga pensar en mi amor que nunca falla...

Bueno, te estas levantando de nuevo, y otra vez esperarĆ© a que me dediques un poco de tiempo para que conozcas mi corazĆ³n lleno de amor por ti. Si supieras cuĆ”nto te amo y cuĆ”nto deseo tu amor....

Tu amigo, JesĆŗs.